La electroretinografía (ERG) es una técnica diagnóstica utilizada para evaluar la función de la retina mediante la medición de las respuestas eléctricas generadas por las células retinianas, en particular los bastones y los conos, cuando son estimuladas por la luz. Este procedimiento es fundamental para el diagnóstico y seguimiento de diversas patologías oculares y trastornos de la retina.
El ERG se basa en la captura de las señales eléctricas que emite la retina en respuesta a estímulos luminosos. Para realizar este examen, se colocan electrodos en la superficie del ojo, generalmente en la córnea, y en la piel cercana. El paciente se encuentra en un ambiente oscuro y sus ojos son adaptados a la oscuridad durante un período de tiempo específico. Posteriormente, se aplican flashes de luz de diferentes intensidades y duraciones para estimular la retina.
Existen varios tipos de electroretinogramas, cada uno con un propósito específico y capaz de proporcionar información detallada sobre diferentes aspectos de la función retiniana:
- ERG escotópico: evalúa la función de los bastones, que son responsables de la visión en condiciones de baja luminosidad. Este tipo de ERG se realiza después de que los ojos han sido adaptados a la oscuridad.
- ERG fotópico: mide la respuesta de los conos, que son las células responsables de la visión en condiciones de luz diurna y de la percepción del color. Este examen se lleva a cabo bajo condiciones de iluminación normal o intensa.
- ERG multifocal: proporciona un mapa detallado de la función retiniana en diferentes áreas de la retina. Es especialmente útil para identificar y localizar áreas específicas de disfunción retiniana.
- ERG de patrón: evalúa la función de las células ganglionares y la capa de fibras nerviosas de la retina. Es útil para detectar enfermedades del nervio óptico y la retina interna.
La electroretinografía es una herramienta esencial en la oftalmología y la neurofisiología visual. Permite el diagnóstico de diversas enfermedades hereditarias de la retina, como la retinitis pigmentosa, las distrofias de conos y bastones, y otras retinopatías. Además, es útil en el seguimiento de enfermedades adquiridas como la retinopatía diabética y la degeneración macular relacionada con la edad.
El procedimiento de la ERG es generalmente bien tolerado por los pacientes, aunque puede resultar incómodo debido a la colocación de los electrodos en el ojo. No obstante, es un examen no invasivo y seguro, que proporciona información crucial para la evaluación y el manejo de las enfermedades retinianas.