La pielonefritis es una infección del tracto urinario superior que afecta principalmente a los riñones. Esta condición puede presentarse de forma aguda o crónica, y su etiología generalmente está relacionada con la invasión bacteriana. Las bacterias más comúnmente implicadas son Escherichia coli, aunque también pueden estar involucradas otras especies como Klebsiella, Proteus y Enterococcus.
Patogenia y Mecanismo de Infección
La pielonefritis suele originarse a partir de una infección ascendente desde el tracto urinario inferior, como la vejiga (cistitis). Las bacterias ascienden por los uréteres hasta llegar a los riñones. En casos menos frecuentes, la infección puede llegar a los riñones a través del torrente sanguíneo, una condición conocida como pielonefritis hematógena.
Sintomatología
Los síntomas de la pielonefritis pueden variar en severidad y pueden incluir fiebre alta, escalofríos, dolor en el costado o en la región lumbar, disuria (dolor al orinar), polaquiuria (aumento de la frecuencia urinaria) y tenesmo vesical (sensación de vaciado incompleto de la vejiga). En algunos casos, los pacientes pueden presentar náuseas y vómitos. La orina puede mostrar signos de infección, como turbidez, mal olor y, en algunos casos, hematuria (presencia de sangre en la orina).
Diagnóstico
El diagnóstico de la pielonefritis se basa en una combinación de la historia clínica, el examen físico y pruebas de laboratorio. Los análisis de orina, incluyendo el urocultivo, son esenciales para identificar la presencia de bacterias y determinar su sensibilidad a los antibióticos. Las pruebas de imagen, como la ecografía renal o la tomografía computarizada (TC), pueden ser utilizadas para evaluar complicaciones como abscesos renales, obstrucciones o anomalías anatómicas.
Complicaciones
Las posibles complicaciones de la pielonefritis incluyen la formación de abscesos renales, sepsis (infección generalizada del cuerpo) y daño renal crónico que puede llevar a la insuficiencia renal. La pielonefritis crónica, aunque menos común, puede resultar de episodios repetidos de infección renal y está asociada con cicatrización renal y pérdida progresiva de la función renal.
Factores de Riesgo
Entre los factores de riesgo para desarrollar pielonefritis se encuentran las malformaciones anatómicas del tracto urinario, el reflujo vesicoureteral (flujo retrógrado de orina desde la vejiga hacia los uréteres), el uso de catéteres urinarios, el embarazo y enfermedades que afectan el sistema inmunológico, como la diabetes mellitus.
Tratamiento
El manejo de la pielonefritis implica el uso de antibióticos adecuados, generalmente basados en los resultados del urocultivo. En casos severos, puede ser necesario el tratamiento hospitalario con antibióticos intravenosos. Es crucial completar el curso completo de antibióticos para evitar la recurrencia de la infección y reducir el riesgo de complicaciones.